El análisis lo hace Jorge León Jaramillo Molina, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad de Medellín.
Bajar las tasas de interés y que aumenten los subsidios por parte del Gobierno, son las soluciones que se deben implementar para salir de la crisis que tiene el sector de la construcción y la adquisición de vivienda en Colombia. Así lo explicó Jorge León Jaramillo Molina, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad de Medellín.
El tema es preocupante debido a que, según Camacol, en los primeros tres meses de 2024, las ventas de vivienda en Colombia registraron una contracción del -17,7 % frente mismo periodo de 2023, con un total 32.017 unidades comercializadas.
Para el decano es positivo que el Banco de la República esté bajando las tasas de interés y lo mismo algunos bancos.
“Bajan sus utilidades, pero también tienen que ser muy serios a la hora de otorgar el crédito, o sea que la persona sí tenga la capacidad para pagar su vivienda, para no quedarse con este inventario”, explicó Jaramillo Molina.
El experto también agregó que es necesario que el Gobierno Nacional siga con los incentivos o subsidios que se implementaron para reactivar el sector durante el gobierno Duque como medida pospandemia.
Para el decano, el alto costo de las viviendas y las altas tasas de interés tienen un impacto muy grande para las familias colombianas. Sin embargo, opinó, ya ha habido algunas soluciones al respecto.
“Es cierto que las viviendas han subido su precio dado por el alto costo de materiales donde la industria colombiana no tiene manera de tener un manejo del precio del acero que desde hace 2 años ha estado por las nubes; hoy, al contrario, está llegando mucho acero de la China con menor precio y está bajando este precio de los materiales”, detalló.
¿A qué se debe la crisis en el sector?
Para el también docente y analista, es preocupante que los constructores se estén quedando con las unidades o edificios construidos, lo cual está ocurriendo por las altas tasas de interés que no les permiten a las familias financiar a 15 o 20 años las viviendas, además porque los bancos no tienen cómo subrogar al no vender.
“Los bancos se están quedando con esa cartera vencida, tienen que provisionar y por lo tanto se convierten en un sector de riesgo y nadie le va a querer prestar a los constructores, excepto que tengan los proyectos vendidos y que tengan las cuotas iniciales recolectadas en una fiduciaria”, explicó.
Debido a esto, el sector de la construcción se está quedando sin unidades (edificios o conjuntos) por vender, con un alto stock de inventario y con problemas financieros. A esto se le suma la mano de obra que se deja de contratar, que son alrededor de 2 millones de personas en Colombia.
“Estamos en una tormenta perfecta, en donde el Gobierno no le ha aportado las condiciones financieras en sentido de que baja los subsidios, de que las tasas de interés subieron, es un tema externo, dado por una inflación que ya se puede mejorar con los del sistema financiero bajando las tasas de interés y el Banco de la República está haciendo lo mismo para reactivar toda la industria pero sin duda alguna los menos beneficiados con todo estos síntomas anteriores de inflación y altas tasas de interés es el sector de la construcción”, dijo.
En suma, para el decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad de Medellín, deben unirse el Gobierno, el sector privado y el financiero para incentivar la compra de vivienda usada y nueva en el país.